Los aligustres que pueblan algunas de las calles del barrio de San Juan, en nuestra villa, están sufriendo una abundante caída de hojas, inexplicable en esta especie arbórea, que las mantiene en todas las estaciones del año, al ser de hoja perenne. Así lo hemos podido comprobar esta mañana, mientras dábamos un paseo por el pueblo.
Intentando averiguar la causa de esta anomalía, alguien ha aventurado que podría deberse al vertido de sal efectuado en las calles con motivo de la nevada del día 9 del pasado mes de enero y posteriores heladas que convirtieron la nieve en hielo.
De ser así, convendría tener cuidado, cuando se arroje sal en las aceras, para evitar en la medida de lo posible que caiga en los alcorques de los árboles, se filtre por la tierra y perjudique a las raíces. Confiemos en que el mal no sea irremediable y con la llegada de la primavera recuperen estos árboles su lozanía. De momento, con la abundancia de lluvias propia de estos días, habrá que ir retirándolas para que no se obstruyan las alcantarillas.
FOTOGRAFÍAS
Domingo, 7 de febrero de 2021
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