Escribimos estas líneas a las cinco de la tarde del día 30 de agosto, domingo, último de las fiestas. Ayer por la noche, a las once, otro toro del cajón y encierro, con animación, una vez más, de la charanga La Gaveta. A destacar, el buen tiempo reinante y la presencia en Pedrajas de muchos forasteros para disfrutar de nuestras fiestas. En la Plaza Mayor, verbena amenizada por la orquesta Origen, en la que toca el pedrajero Álvaro Caviedes.
Esta mañana, último encierro de nuestras fiestas, con mucha menos gente en la calle, ya que Cuéllar comenzaba los suyos. La noticia de la muerte de un hombre corneado por un toro en la villa cuellarana se difundía vertiginosamente de viva voz y por las redes sociales.
Para tomar fotografías hoy nos hemos colocado en lo alto de las paredes de la peña Los Domasuegras, donde se juntan las calle Río Duero y Ronda de Santa Ana. Novillos y cabestros iban y venían sin apenas detenerse, cansados, sin duda, del juego al que se veían sometidos. Al final, por ser el último día, se han soltado todas las reses a la vez, espectáculo siempre digno de contemplar.
Los chicos del Ayuntamiento procurando que todo esté a punto.
Finalizado el encierro, ha cobrado especial protagonismo el toro del cajón del primer día, que se empeñaba en no querer regresar a los toriles de la Plaza. Un toro del cajón que, hoy, visto a la luz del día y desde lo alto del graderío, nos ha parecido más bonito y proporcionado. Se ha comentado que el otro día, en los toriles, acometió y mató a otro novillo.
GAMBERRISMO
Desgraciadamente, los días de las fiestas suelen producirse actos de gamberrismo. El viernes por la noche, alguien tuvo la brillante idea de introducir petardos en el buzón del correo de una casa de la calle Gallegos, reventando la puerta.
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