CABALGATA DE LOS REYES MAGOS

A las siete de la tarde, oculto ya el sol y de incógnito, se han presentado sus majestades los Reyes Magos del Oriente en la residencia de la tercera edad “Hogar Betania” para entregar sus regalos a los residentes antes de la hora de cenar, sin prisas. En años anteriores, esta visita se hacía con toda la cabalgata, más tarde, por lo que la espera se les hacía más larga a las personas mayores. Y mientras visitaban la residencia, en la calle, tenían que esperar los componentes de la cabalgata, generalmente pasando frío.

En el salón de actos esperaban a los Reyes todos los residentes, acompañados por sus familiares más cercanos, las hermanas de Marta y María, y algunos miembros de la Corporación Municipal, ayudando a portar los regalos. Este año, una bolsa con útiles de aseo personal que los Reyes y sus pajes han ido entregando uno a uno a los ancianos. Los que así lo han querido han podido fotografiarse con tan ilustres visitantes, como podéis ver en estas imágenes que hemos tomado.

Concluida esta primera e importante visita, los Reyes han caminado hasta el frontón municipal donde les esperaba el resto de su séquito, dispuesto en lo alto de varias carrozas bellamente engalanadas para la ocasión.

1. Carroza de la asociación musical “Eres+” con sus componentes vestidos de punkis.

2. Carroza del grupo de danzas “Estepa castellana”, representando el mundo de los elfos. 

3. Carroza de la asociación cultural “Santa Águeda”, que llevaba el título de Laponia, la tierra de Papá Noel.

4. Carroza del AMPA “Miguel Delibes” recreando el buque escuela Salacia, dedicado a recoger residuos por los mares.

5. Carroza de la asociación cultural flamenca “El Lerele” ideada en torno al juego del parchís.

6, 7 y 8. Carrozas de los Reyes Mayos.

Estas ocho carrozas, precedidas por la tuna Las Mañanitas –niños y mayores- se han encaminado hasta el centro del pueblo arrojando caramelos al numeroso público congregado a lo largo de las calles del recorrido: Rosaleda, Pinar, Frontón, Giroteo, Las Escuelas y San Esteban. Al lado del pórtico de la iglesia se encontraba el palacio del rey Herodes, rodeado de gente. Allí se han detenido un rato sus majestades para preguntarle por el Niño, una escena en cuya representación han participado, como heraldos, tres jóvenes muy parecidas a las actuales reinas de las fiestas.

Siguiendo la estrella que los guiaba, los Reyes se han dirigido por la Plazuela de San Agustín y la calle Real Nueva hasta la Plaza Mayor de la villa, donde se había recreado el portal de Belén. Arrodillados ante el Niño Jesús, lo han adorado y le han entregado oro, incienso y mirra, como Rey, Dios y Hombre. Seguidamente, han subido al balcón de la Casa Consistorial para dirigir unas palabras a los niños del pueblo y lanzar sobre sus cabezas cientos de caramelos. Después, todos hemos podido contemplar el espectáculo de los fuegos artificiales lanzados al cielo desde la azotea del Ayuntamiento.

Antes de empezar a visitar las casas para entregar a cada niño sus regalos, Sus Majestades han subido a lo alto de un estrado para conversar un rato con todos los niños que lo han deseado, sentados en su regazo. Eran las nueve de la noche y hacía mucho frío, pero lo compensaba el calor que latía en todos los corazones, especialmente en el de los niños aún inocentes.