"La cultura es el ejercicio profundo de la identidad."
Julio Cortazar.
Me sorprende la noticia de que en el acogedor pueblo castellano de Pedrajas de San Esteban, rico en piñones y en ilustración, y donde he tenido el honor de asistir durante un par de encuentros literarios, uno de los partidos presentes en la liza electoral propone eliminar su muy activa Sala de Exposiciones y transformarla en centro de pilates, yoga y bailes de salón, cuando Pedrajas dispone de otros centros donde desarrollar actividades lúdicas.
Si hay algo que define a una nación, a una ciudad, o a un pueblo es su interés por la cultura y su afán en promoverla. De estos cuidados crecerá una identidad propia de la que se benefician ciudadanos y visitantes. Nada hay más loable que exportar y mostrar cultura porque con ello demostramos nuestro propio nivel intelectual.
En estos momentos de campaña electoral donde todos los partidos – es su obligación - nos hablan del bienestar que para el ciudadano nos confieren unos buenos servicios públicos como la sanidad, la enseñanza, el empleo o las infraestructuras, todos ellos indudablemente muy necesarios, echo de menos los discursos que nos aseguren también el bienestar del espíritu – que no espiritual -, es decir: acciones que nos permitan elevar nuestro nivel cultural y el de nuestros hijos, porque eso será un bagaje que nadie nunca les podrá arrebatar. Olvidarán las ecuaciones, los nombres de los Borbones y la Tabla Periódica de los elementos, pero ¡jamás! aquella película, obra de teatro, libro, pieza musical, escultura o pintura que les hizo emocionarse, percibir formas y colores maravillosos, o aquella canción con la que se enamoraron. Y todo gracias a la Cultura con mayúsculas.
Estoy de acuerdo que, en tiempos difíciles, haya otras prioridades: Primum manducare, deinde philosophari. Sin embargo, cuando un lugar de encuentro cultural está ya creado y en funcionamiento – en óptimo funcionamiento – eliminarlo es un atentado contra la cultura, y lo que es peor: contra la propia identidad. Aquí está la diferencia de concepciones: culturizar para pensar o distraernos para no hacerlo.
Son los pedrajeros quienes tienen la palabra. Pero disfrutar de un lugar como su Sala de Exposiciones no es incompatible con desarrollar las actividades lúdicas en otros espacios. Las puertas de la cultura en Pedrajas deben permanecer abiertas para demostrar su compromiso e identidad con las sensaciones que nos proporciona una escultura, una pintura, un dibujo o una fotografía; si además nos relajamos con el yoga y bailamos bien la rumba, miel sobre hojuelas. Pero que no sea a costa de un prestigio bien ganado y del trabajo bien hecho.
Jordi Siracusa.
Mi más cordial enhorabuena y de acuerdo en todos los conceptos y preocupaciones expresadas. Soy Pedrajero y me parecería una verdadera torpeza el propósito de algunos. Repito mis felicitaciones más compartidas por esa defensa tan bien expuesta y sobre todo razonada. De acuerdo en todo.
ResponderEliminarSaludos. Jose Maria Martin Sanz