ANTE LAS NUEVAS ELECCIONES

A los Candidatos de los Partidos:

Desde el pasado 20 de diciembre hasta hoy, fecha en la que están a punto de ser convocadas nuevas elecciones, han pasado cuatro largos meses en los cuales ustedes, los políticos, no han cejado ni un momento de martillearnos, a través de los Medios de Comunicación, con noticias y opiniones sobre sus reuniones fallidas, no faltando en ningún momento las descalificaciones dirigidas a sus adversarios. Es tal la reiteración que nos sentimos intoxicados de información y más que estar dispuestos a comenzar una nueva campaña, necesitaríamos un tiempo de reposo y desintoxicación. Me temo que ustedes no nos lo van a permitir. 

¡Señorías!: Sería de desear que los responsables de cada Partido se centraran en  explicar a la ciudadanía el ideario de su programa, sencilla y llanamente, dejando a un lado el bombardeo de descalificaciones dirigidas al contrario. Dejen que los votantes saquemos nuestras propias conclusiones. De antemano sabemos que gobernar no es fácil y más en esta situación.

Si les tuviera a mi alcance, les pediría dos cosas:

1ª. Por favor, no subestimen a todos y a cada uno de los votantes. Entendemos perfectamente los mensajes cuando son claros, concisos y veraces, Sólo queremos saber qué es lo que harían con nuestro maltratado país, si a alguno de ustedes les tocase gobernar. ¿Cómo afrontarían los graves problemas que nos acucian?

2º No se gasten ni un duro más. Porque ya van fuera de plazo. Los ciudadanos cumplimos con nuestra obligación expresando nuestra voluntad: "No hay lugar para las mayorías absolutas, ese tiempo ya finalizó, al menos por esta vez". Ahora toca apañárselas, que quiere decir "entenderse", "llegar a acuerdos", "pactar", o como lo quieran llamar. Nosotros hemos cumplido, ustedes no. No tienen derecho a gastar de nuevo el dinero de todos.

¿Qué ha pasado con el tiempo transcurrido desde las anteriores elecciones a esta fecha? Pues que hemos asistido a una grande y continuada partida de caza en que salen numerosos cazadores a competir por las mismas presas. Mientras unos cazadores, nerviosos, hiperactivos, vocean, gesticulan y hacen muchísimo ruido a fin de levantar las piezas y hacer más fácil el disparo, otro más experimentado, más taimado también, espera semioculto a que la pieza pase por su lado malherida o al menos exhausta y asustada. Sólo tiene que alargar el brazo y cobrar el trofeo. En lugar de organizarse, la solución es volver a celebrar otra cacería. ¡Señores! Esto no es serio. ¿Han llegado a pensar que pueden repetirse, con poquísimas variantes, los resultados y en ese caso estaríamos otra vez en el  punto de partida, con todo el sufrimiento y el coste que supone el tiempo perdido?

Todos ustedes son unos patriotas, eso nos dicen todos los días. En este caso, les ha dominado el cálculo de lo que podrían perder o ganar, a corto y a largo plazo.  Ninguno de ustedes ha dejado de pensar en sus intereses y se ha centrado en lo que le convenía al País, en la situación en que se encuentra y en este preciso momento, así de sencillo. Yo no puedo hablarles de alta política porque no entiendo a ese nivel. Pero sí sé que en las grandes ocasiones se conoce a los grandes hombres y a España, si no la poblamos de grandes hombres, pronto entrará en la UCI: ¿Qué me dicen del hecho de que a una joven de 28 años, con una carrera universitaria y varios masters se le ofrezca un trabajo de ocho horas diarias con un sueldo de 600 € o que a un padre de familia se le pague un jornal de 1000 € e incluso mucho menos? Fíjense que no les hablo de los parados ni de los que se han caído ya del lado de la pobreza.

Pero si quieren escucharme les hablaré también de la temporada de escándalos sobre corrupción, sobre los patriotas que tienen sus dineros a salvo en Panamá y otros paraísos fiscales, de la corrupción que reina entre políticos y empresarios para hacerse con los contratos de la Administración, de la cuchipanda que representan las subvenciones a empresas y proyectos y que nadie se molesta luego en hacer seguimiento e inspeccionar, si son llevados a cabo en el modo y en la forma. ¿Cuándo habrá responsabilidades políticas que purgar en España? ¿Cuándo vamos a ver que los responsables de toda esta situación son severamente castigados? 

Señores: déjense de intereses de partido y de intereses individuales, (me refiero a todos los partidos, pero mucho más al gobernante). Dejen que aflore su vena de hombres de estado: generosos, inteligentes y comprometidos. Verán que el electorado lo sabrá reconocer.

Por último, aunque estemos cansados, acudamos a votar. Cuidemos la Democracia.

Atentamente. 

Teresa González Lozano.

Barcelona, 2 de mayo de 2016.