Pocas estrellas fugaces pudieron ver anoche los que caminaron hasta la ermita de Sacedón para contemplar las lágrimas de San Lorenzo, que suelen producirse en esta época del año. Pocas, porque los cielos volvieron a cubrirse de nubes y el brillo de las estrellas sólo aparecía temporalmente, en pequeñas áreas. La luna, ya decreciendo, apenas pudo contribuir a iluminar la marcha de los paseantes entre los pinos. Se vislumbraba, eso sí, al pasar, la mancha negra de las primeras capas de asfalto que cubren ya el camino de Sacedón.
En la ermita, ya se sabe, la gente tomando el chocolate, en corros o en el bar del kiosco, lógicamente abierto. Después, sentados en la pradera, especialmente los más jóvenes, a contemplar la proyección audiovisual que ofreció J&J Audiovisuales (Cine Avenida), que consistió en unas bonitas imágenes aéreas de una parte del casco urbano de Pedrajas, la de los alrededores del Parque “Jardines de Castilla”, tomadas, suponemos, con un dron. Luego, varios cortos de animación que levantaron la sonrisa de los espectadores. En cuanto a participación, nos pareció menor a la de años anteriores, tal vez porque el tiempo se puso algo fresco o porque algunos prefirieron quedarse a ver el fútbol en la tele, el Real Madrid-Sevilla, por la supercopa europea.
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