MARTES DE CARNAVAL

AL MAL TIEMPO, BUENA CARA

Con tiempo muy desapacible, por el fuerte y frío viento reinante, celebra nuestro pueblo el martes de Carnaval, día grande de estas ancestrales fiestas. A las once y media de la mañana ha comenzado el desfile de los niños desde las puertas del Colegio hasta la Plaza Mayor. Desde allí, hasta el solar de la calle de las Huertas, junto a la Avenida de España, donde los quintos nacidos en 1997, con sus 18 años ya cumplidos o todavía por cumplir, han celebrado la tradicional carrera de cintas. 

Un descanso en el desfile.

En presencia de sus familiares más cercanos y de numerosos vecinos del pueblo, veintitrés chicos y chicas han corrido las cintas cabalgando sobre once burros bellamente engalanados para la ocasión. Ocho de estas monturas han sido contratadas a una familia de Ataquines que los cría y cuida con cariño para romerías, ferias y otras fiestas populares semejantes.

Los burros de Ataquines, con sus dueños y cuidadores.

Tres han sido las cestas de colgadas en lo alto de una gruesa maroma: la primera, con cintas verdes y amarillas, los colores de la bandera de nuestra villa; la segunda, con cintas multicolores; la tercera, con cintas rojas y gualdas, de la bandera de España.

Como suele acontecer todos los años, no les ha sido fácil a los quintos dominar a sus caballerías para pasar por debajo de las cestas y conseguir el preciado trofeo de alguna de sus cintas por las que siempre suspiran los espectadores. Ha habido varias caídas y posiblemente algún mozo o moza hayan sufrido alguna lesión, nada grave, creemos. En una de estas caídas uno de los quintos ha perdido un billete de 10 euros que ha echado a volar, impulsado por el viento y perseguido por un hombre que ha tardado lo suyo en darle caza. ¡Lástima no haberlo podido grabar en vídeo!

Algunas de las caídas.

Acabado el espectáculo, familiares y amigos a hacerse fotos con los protagonistas. No han faltado varias fotos de grupo, como recuerdo para la posteridad. Esta tarde, a partir de las cinco, en el Frontón Municipal, concurso de disfraces y discomovida, con importantes premios.

Madres, padres... y una abuela, la señora Dionisia.