Mucho público anoche, en la entrega de premios del XII Certamen de Novilleros “El Piñón de España”. Un público que pasó un rato muy agradable por el gran partido que Javier Fernández Cisneros, encargado de prepararlo y dirigirlo, supo sacar a todas las personas que participaron en el coloquio. Antes de seguir adelante hemos de indicar que el novillero premiado, ESAÚ FERNÁNDEZ, no pudo venir a recoger su trofeo por haber sufrido recientemente un percance toreando un novillo a puerta cerrada. Un montaje audiovisual con imágenes de la pasada feria de San Agustín y una relación de todos los novilleros vencedores del certamen sirvió de preámbulo al acto.
El coloquio se inició con unas palabras de Nicolás Martín, el picador de Esaú Fernández, que vino en su representación. Habló de Esaú como un chico muy sencillo, perteneciente a una familia humilde de Camas (Sevilla), con una gran afición por los toros y una gran capacidad de sacrificio: “torea extraordinariamente bien con la izquierda y se esfuerza al máximo”. De pequeño era “un botijo”, muy gordito, pero con mucha fuerza de voluntad logró bajar todo el peso que le sobraba para poder ser torero. Actualmente ocupa el tercero o cuarto puesto en el escalafón de novilleros y tomará la alternativa la próxima temporada en Francia, acompañado de Manzanares y Morante de la Puebla.
Seguidamente le correspondió el turno a Antonio Pérez-Tabernero Angoso, llegado a Pedrajas para recoger el premio a la mejor ganadería, una de las más emblemáticas de España, situada en el campo de Salamanca. Habló de los novillos que trajeron a Pedrajas, que sorprendieron por su fuerza y presencia. A instancias de Javi expresó su opinión sobre el momento tan difícil que atraviesan las ganaderías de bravo, también la suya, cuyos toros –reconoció- no están ahora de moda. Insistió en que la política se había metido en el mundo de los toros y le estaba haciendo mucho daño.
El Doctor Nabil, sirio, médico de la Plaza de Toros de Pedrajas desde hace ya 18 años fue el siguiente invitado en tomar la palabra. Habló de las enfermerías de las plazas, del material, no siempre el necesario; de las condiciones en que tienen que trabajar cuando las plazas son portátiles, como la de Alcazarén. Destacó que la normativa exige muchos más requisitos en las novilladas que en los encierros o becerradas, cuando la experiencia le ha demostrado que estos festejos populares suelen ser más peligrosos. Se deshizo en elogios hacia Pedrajas, su plaza de toros, “la más bonita de toda Castilla y León”, y su enfermería, que está muy bien.
Al lado del moderador del coloquio se encontraba Sergio Ledo, nuestro alcalde. Preguntado si seguirían con las novilladas –elecciones municipales por medio- a pesar de la falta de recursos que experimentan todos los municipios, Sergio manifestó que quedaba un año de contrato con Caminero y que, lógicamente, se cumpliría. Y para el futuro, su apuesta era seguir, procurando mejorar un poco cada temporada. Habiendo salido a relucir el tema de la reducción de festejos taurinos de algunos pueblos, Javi defendió que se recortara de todos los espectáculos, por ejemplo, de orquestas, no sólo de los taurinos, ya que los aficionados a los toros también pagan impuestos. El alcalde añadió que el Ayuntamiento ha procurado siempre dar gusto a todos los vecinos, programando en las fiestas actuaciones muy diversas.
A Cecilio Vadillo, subdelegado del Gobierno, se le pidió su opinión sobre la posibilidad de que las corridas de toros dejen de depender del Ministerio del Interior y pasen a Cultura. Por una parte estaría bien –indicó- ya que sería una manera de reconocer el toreo como un arte, pero duda que salga del todo de Interior porque los espectáculos taurinos requieren una importante dedicación por parte de las fuerzas de seguridad del estado.
A Jorge Arranz, concejal de Festejos, se le preguntó por el tema de los toros del cajón, que se han puesto tan de moda en muchos pueblos estos últimos años y que atraen a tantos aficionados. Explicó cómo se buscó el toro de las pasadas fiestas, un ejemplar precioso, que luego no dio todo el juego que se esperaba de él, ya que debido a su propio peso, se le destrozaron las pezuñas corriendo por el cemento de las calles de nuestro pueblo. Entonces salió a relucir en la mesa el tema de que los de los bares podían aportar algo, ya que son los más beneficiados por tanta gente como atraen.
Simón Caminero, sentado en uno de los extremos de la mesa, con su característica melena de color blanco, fue el que más juego dio, nos reímos un buen rato con él: esta noche no puedo pedir dinero, por no saber quién será el futuro alcalde… la fiesta de los toros está fatal en los pueblos, con tantas paellas y pancetadas como se hacen… lo de los toros del cajón es una imbecilidad como la copa de un pino, tengo ganas de que se escape un día un toro del cajón… yo quiero mucho a Pedrajas, aunque pierda dinero todos los años, pero a lo mejor viene un mequetrefe y me quita esta plaza… Y ya en serio, estoy a gusto en Pedrajas, y seguiremos aquí.
Sólo quedaba la entrega de los galardones. El alfiler de oro, patrocinado por la Asociación Castellana de Elaboradores de Piñón, y el talón por valor de 600 euros, le fueron entregados a Nicolás Martín, el picador de Esaú Fernández, por Cecilio Vadillo y Sergio Ledo, respectivamente. [¿Dónde se encontraban los piñoneros patrocinadores?] Santiago Calvo, presidente de la Asociación Cultural Taurina de Pedrajas, hizo entrega a Antonio Pérez-Tabernero, del trofeo que le acreditaba como mejor ganadería de la pasada feria. Finalmente, Javier Fernández recibió un obsequio del Ayuntamiento de Pedrajas –un reloj- por su excelente colaboración en la organización actividades de tema taurino, como esta entrega de premios y coloquio.
Acabado el acto, la tertulia se trasladó a los salones del Hostal Mayoral, donde se sirvió un vino español a las autoridades presentes, invitados y aficionados en general, especialmente los componentes de la Peña Taurina de Pedrajas. Se nos olvidaba, también estuvieron presentes las tres reinas de las fiestas.
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